«Gran Hermano 17»: El engaño de Miguel con su supuesta calva

Miguel Vilas, el concursante gallego de Gran Hermano 17, parece estar ganando puntos para ser uno de los participantes de esta edición que más huella deje en el programa y sobretodo en la audiencia, más allá de los clásicos líos amorosos.

El gallego entró con uno de los engaños más extraños de todos, y aunque la audiencia lo sabía desde el minuto uno, poco a poco se lo ha ido revelando a sus compañeros. Pero, ¿y si Miguel no fuese tan calvo como pretendió hacernos creer?

Unas imágenes colgadas en el blog El Gato encerrado, de Telecinco, han suscitado las dudas, o casi las han despejado. Miguel no es tan calvo como pretendió hacerle creer al programa y a la audiencia. Ese ha sido uno de sus mayores engaños, y solo ha sido a las puertas de la final cuando, no se sabe si por un despiste o de forma totalmente premeditada, Miguel ha dejado verse tal y como es, y desde luego, no es calvo.

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Las fotografías hablan por sí solas. El concursante gallego está muy lejos de ser calvo, aunque sí que tiene lo que se conocen como entradas (que tampoco exageradas), pero después de quitarse el peluquín, quemarlo y raparse al cero, ahora, al crecerle de forma uniforme su pelo, se puede comprobar que no podría considerarse calvo.

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Este último engaño podría no ayudar mucho al concursante gallego de cara a la final de Gran Hermano, que está cada día más cerca. El modelo ha aguantado buena parte del reality sin grandes complicaciones, pero ahora, es la hora de la verdad. Con solo cinco concursantes en la casa, el programa los considera ya finalistas y ha abierto los teléfonos para que abandone la casa el que menos apoyo tenga el próximo jueves.

Lo de su supuesto problema capilar no habría sido el único engaño que Miguel habría contado en el programa y a la audiencia. En los últimos días el gallego ha abierto su corazón, una vez más y ha confesado en la casa su particular drama navideño: en su casa dejó de celebrarse la Navidad tras la muerte de su padre. Explicó que «odia la Navidad» y que él no celebra cenas, no decora la casa ni intercambia regalos con sus seres queridos. Pero en este caso, las redes sociales han sido las que han destapado esta supuesta mentira. Varios usuarios han buceado en el Facebook del modelo para encontrar varias entradas referidas a la Navidad, de no hace tantos años.

Su bisexualidad, su otro gran secreto

El concursante gallego se ha revelado con una de las principales cajas de sorpresas del programa. Su declaración de amor a Pol o su pasado oculto, entre el que podría estar una relación con Markus, de Quién quiere casarse con mi hijo, han dado cierta vidilla a un programa que no pasa por su mejor momento tras el cambio de presentador. 

La madre de Miguel Vilas reveló hace unas semanas a través de una intervención telefónica durante el Debate de Gran Hermano que desconocía que su hijo «era calvo y bisexual».

El concursante gallego mostró en el confesionario sus miedos a cómo estaría viviendo su familia su paso por la casa: «me imagino que mi madre estará tan avergonzada de mí, tiene que ser tan duro, tan horroroso», explicaba. Y añadía que probablemente a su familia «no les gusta nada de lo que hago, pero necesitaba explotar que y la gente supiese quién era realmente».

El gallego seguía imaginándose a su madre «mirando la televisión y al segundo día apagarla». Describía a los suyos como «la gente más humilde que te puedas imaginar», pero «muy cerrada». «Me tiene que haber desheredado», explicaba. Además añadía que su madre, «es poli, es supermaja y la gente del mi pueblo la estará ridiculizando». Aseguraba que «ahora te das cuenta de la importancia de una madre». Además les explicaba a sus compañeros que «soy de pueblo, no de ciudad» y decía que su madre probablemente no estuviese viendo en su comportamiento «los valores que ella me inculcó». 

Tras estas declaraciones Loli, policía local en O Grove, entró en directo para apoyar públicamente a su hijo. «Mi pueblo es un lugar maravillo», afirmaba, y proseguía aseverando que «estoy súper orgullosa de él, todo lo que haga lo voy apoyar».

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Jordi González le preguntaba con asombro si no era conocedora de la verderadera imagen de su hijo ni de su condición sexual. «Lo del pelo no lo sabía. Miguel viene una vez al año a Galicia y siempre está cambiando de peinado», explicaba.

En el tema de la bisexualidad, pese a la incredulidad del presentador, que reiteró que «hay cosas que una madre sabe», afirmó que lo desconocía también. «No sabía tampoco lo de su bisexualidad porque siempre lo he visto acompañado por chicas. Me ha sorprendido muchísimo». Eso sí, insistía en que se sentía muy orgullosa «de él y ha sido muy valiente».