El tenista se mostró preocupado, aunque espera a que todo se deba a una sobrecarga, y que en los próximos días pueda seguir entrenando, pero afirma que no está «seguro al cien por cien»
«No puedo predecir si mi cuerpo me permitirá disfrutar del tenis tanto como disfruté los últimos veinte años», asumió el español, que vuelve a jugar este martes