«MasterChef»: Todos contra Jon, el nuevo enemigo público
Jorge se convirtió en el séptimo expulsado y Fabio, el guapo oficial de la edición, estuvo un día más en la cuerda floja
Redacción / La Voz
Jon es el nuevo enemigo público en MasterChef. Y quedó absolutamente patente en la primera prueba individual del programa, que ya avisó antes de comenzar la temporada que no se andaría con chiquitas y que todas las pruebas incluirían maldades para ponerle un poco de pimienta al juego. Los concursantes debían de robarle doce ingredientes de su cesta a otro participante. La primera en entrar en las cocinas de MasterChef fue Ketty, que tenía muy claro a quién quería dejar sin opciones a la hora de la prueba de cocinado en la que se decidirían los capitanes de la prueba por equipos. Así que se dirigió directamente a la cesta de Jon y le quitó los doce ingredientes que consideró que podían dejarlo en clara desventaja. Lo curioso vino después, cuando tras ir entrando uno a uno el resto de concursantes todos iban directos a la cesta de Jon. Sí, el vasco es el más odiado de los concursantes de MasterChef. La frustración fue creciendo porque cada vez que uno se acercaba a la cesta veía que ya habían esquilmado todo lo posible y tenían que buscar un plan b. Pero fue unánime, el primer objetivo de todos los concursantes fue Jon. Y cuando le tocó a él, supo jugar bien sus cartas. Porque si a alguien en MasterChef se le ocurre semejante desventaja es para usarla. Y Jon la usó. Dejó la cesta de Sofía, la alcaldesa que forma ya la pareja oficial (aunque ellos insisten en que son amigos) de este MasterChef, temblando. Le quitó hasta el pichón, quedándole unas frambuesas, unos garbanzos cocidos y unas tristes espinacas.
Jon es un superviviente, y ha ido a MasterChef a concursar, no a hacer amigos. Además hay que recordar que el vasco es uno de sus concursantes que se quedó a las puertas del concurso en varias ocasiones. Así que sus robos en la cesta de Sofía la colocaron como la peor de la prueba junto a Fabio, y Jon fue elegido como uno de los mejores de la prueba. Una prueba en la que hicieron su aparición Amaia y Alfred, que probaron el pichón de Jon e incluso cantaron.
Pero como MasterChef es imprevisible los peores se convirtieron en capitanes. Sofía supo sacar partido a su primer capitanía mientras que Fabio dejó claro sus carencias en la cocina y su equipo fue directamente a la prueba de eliminación. Allí, el concursante estuvo en la cuerda floja totalmente pero se salvó en el último momento gracias a una hamburguesa, que condeno a Jorge y a Oxana a la prueba en la que se jugaron la expulsión.
Y finalmente fue Jorge, que había comenzado con muy mal pie su paso por MasterChef tras enfrentarse a Samantha Vallejo-Nájera, el que tuvo que decir adiós tras un tiramisú mal ejecutado. Jorge además siguió luchando hasta el final y ante el reto de los jueces de que el que fuese el peor se quitase el delantal, se negó y defendió su plato a muerte.
La triste despedida de Jorge y los malos rollos con Jon colocaron a MasterChef como líder de nuevo de la noche del lunes, por delante de Allí Abajo y de La Verdad. El concurso gastronómico obtuvo el máximo de la temporada, siendo lo más visto con casi 2,7 millones de personas y un 20,8 % de cuota de pantalla.
La triste despedida de Jorge en «MasterChef»
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