Indignación por los comentarios pedófilos hacia una concursante de «MasterChef Junior»

Valentina Schulz, de solo 12 años, tuvo que soportar mensajes en Twitter como «si ella quiere, no es ni pedofilia, es amor» o «va a salir conmigo, quiera ella o no»


Redacción

Se llama Valentina Schulz, tiene solo 12 años y, tras su participación en la edición brasileña de MasterChef Junior, ha sido objeto de proposiciones indecentes y repulsivos mensajes por parte de hombres adultos a través de las redes sociales que han puesto de manifiesto que el problema de la pedofilia está más presente en la sociedad de lo que se podría llegar a pensar.

Después del primer programa de MasterChef Junior, en el que se presentaba, entre otros concursantes, a Valentina, la niña enseguida se hizo trending topic y aparecieron entre ellos bastantes mensajes sexuales pedófilos. «Si ella también quiere, no es ni pedofilia, es amor», comentaba un usuario a través de Twitter. Otro añadía: «¿Alguien conoce la cuenta de Twitter de Valentina? Va a salir conmigo, quiera ella o no». Y un tuitero decía que «no iba a hablar sobre la niña para no ir a la cárcel». Algunos, según comentó el padre de Valentina en el sitio web IG, incluso llegaron a pedirle a la niña una foto desnuda.

«Estábamos preparados para las críticas y los "haters"», afirma Alexandre, padre de la niña, «pero nunca para los mensajes de tarados». Por suerte, la niña «no se ha visto afectada», afirma su progenitor, porque está siendo protegida y una persona borra los mensajes inapropiados y denuncia a quienes escriben algo ilegal.

La reacción de las redes por estos horribles mensajes no se hizo esperar. Miles de personas que habían leído los desagradables comentarios no tardaron en reaccionar en contra de unos comportamientos pedófilos que siempre habían estado ahí, pero no se habían manifestado tan públicamente.

Así que se abrió la caja de pandora, y miles de mujeres comenzaron a publicar, bajo el hashtag #PrimeiroAssedio (que se traduciría en español como #PrimerAcoso), las experiencias de abusos sexuales nunca confesados que habían sufrido durante su infancia.

Entre ellas estaba la periodista de São Paulo Juliana de Fario, fundadora del colectivo feminista Think Olga, que pronto recibió todo tipo de mensajes de seguidoras que les contaban esas experiencias y evidenciaban cómo el problema social de la pedofilia estaba tan a la orden del día que nadie hacía nada por remediarlo.

En cinco días, se habían hecho más de 80.000 tuits y retuits con el hashtag, ya que «cuanto más se comparte, más gente se suma a compartir su caso», afirma De Fario, que considera que la gente quiere pensar que el hecho nunca pasó, «o nos echamos la culpa a nosotras o pensamos que la sociedad nos va a decir que somos nosotras las reponsables».

Las situaciones confesadas son de todo tipo. «A los once años, me dirigía a mi clase de baile y un hombre me tocó el culo», afirma una usuaria de Twitter, mientras que otra afirma que «a los trece años, un hombre me dijo que tenía ?bonitas tetas?».

Votación
0 votos

Indignación por los comentarios pedófilos hacia una concursante de «MasterChef Junior»