Justin Bieber hace su segunda espantada en dos días
El cantante canadiense se está acostumbrando a darles plantón a las beliebers. ¿Quiere entrar en primera posición de la lista de los más odiados o simplemente está pasando una época de bajón?
Redacción
Justin Bieber está desatado. Desde su breve participación de 7 minutos en el programa de radio conducido por Dani Mateo en Los 40 principales, parece que el chaval se ha acostumbrado a esto de darles plantón a las beliebers.
Unos minutos es lo que ha durado también este viernes sobre el escenario durante su concierto en Oslo. La razón de este nuevo abandono, menos de 48 horas después del anterior, tuvo que ver con la mala actitud de los asistentes al show.
Después de que una fan lanzase una bebida sobre el escenario, Justin Bieber paró momentáneamente el concierto, cogió una mopa y se dispuso a secar el estropicio. Pero sus fans, al ver a su ídolo al borde de la plataforma, no le dejaban en paz. Le agarraban de las zapatillas y tiraban del trapo. Así que el cantante, irritado, intentó que parasen, pero no atendían a razones: «¿Qué estáis haciendo? Parad. He dicho que paréis. Chavales, escuchadme. ¿Me estáis escuchando? Estoy intentando secar el suelo», dijo.
En ese momento, Bieber se agachó para seguir secando, pero ya estaba demasiado caliente. El cantante se levantó y, cabreado, les dijo: «Olvidadlo, ya está. No voy a seguir con el espectáculo», sentenció. Se dio la vuelta y se dirigió a los camerinos, indignado, mientras sus fans gritaban y sollozaban.
Justin Bieber estaba, por segundo día consecutivo, sobrepasado por la situación. Pero, ¿qué le pasa al cantante? El intérprete había dejado de estar durante una buena temporada en la lista de los más odiados, pero en los últimos días parecía ganarse todas las papeletas para volver a estar en primera posición.
Su actitud, sin embargo, no parece ser cosa de la imaginación de sus haters. El propio Bieber, después de su reacción en el concierto noruego, admitía su error y confesaba que no estaba en un buen momento.
«Desgraciadamente no ha sido una buena semana para mí», afirmaba el cantante a través de su perfil de Instagram, que se justificó en las « largas jornadas sin dormir y teniendo que estar preparado para las cámaras, los fans, etc.»
A continuación, Justin se lamentaba de su actitud y explicaba la situación vivida por muchos asistentes al concierto. «De ninguna manera quise ser grosero, pero decidí abandonar el concierto al ver que la gente de las primeras filas no me hacía caso», declaraba Justin, que confiaba en mejorar en su forma de actuar en el futuro. «Espero que la gente entienda de dónde vengo. No siempre actúo de la mejor manera, pero soy un ser humano y trabajo para mejorar en la forma de responder sin reaccionar.»
Por último, el cantante pedía perdón a quienes tuvieron que ver cancelado el concierto sin haber tenido la culpa: «Por desgracia, hay gente que tuvo que sufrir las consecuencias de cómo soy. Quiero pedir perdón a la gente que estaba atrás y a cualquiera que se haya podido sentir decepcionado. Perdón por hacer perder el tiempo de la gente que veía el concierto por televisión. Me aseguraré de que lo arreglo la próxima vez. Con amor, Justin».
La semana de Justin, sin embargo, no pudo empezar mejor, ya que el pasado domingo lograba en la gala de los premios EMA MTV cinco galardones, convirtiéndose en el gran triunfador de la noche.
Todo cambió, sin embargo, durante su visita a España. Hizo un desplante a Los 40 principales por una pregunta que consideró inapropiada y, durante su participación en El Hormiguero, Justin Bieber se mostró en todo momento apático.