¿Qué le hicieron los de Los 40 a Justin Bieber para que dejase a medias la entrevista?

El ídolo adolescente pisó ayer suelo español. En su agenda, dos citas: con «El Hormiguero» y con los 40 Principales. La última acabó en drama. Tras un comentario de Dani Mateo, el cantante se levantó al baño y nunca más volvió


Justin Bieber es de mecha corta en cuanto a paciencia se refiere. Lo demostró anoche, durante su fugaz visita a España. El ídolo adolescente, que generó en la Gran Vía madrileña colas y locura solo comparables con la apertura del Primark, protagonizó en el estudio de los 40 Principales una épica espantada que hoy se recoge incluso en los diarios internacionales. En plena entrevista, Bieber se levantó, dijo que iba al baño y no regresó. En directo. ¿Qué fue lo que enfadó al niño mimado de la industria musical? ¿Qué hicieron Dani Mateo y sus compinches para que el admirado chaval se marcase un «fue a por tabaco y nunca más volvió»?

El desencadenante de la perrencha de Justin Bieber no fue otro que la siguiente frase: «Vamos a aprovechar que está aquí para reventar Internet. Díselo así», animó el humorista Dani Mateo a su colega traductor, para que le trasladase sus intenciones al invitado. Llevaban siete minutos y 48 segundos de entrevista. En la sala de espera, aguardaba lo más selecto del panorama youtuber europeo para entrar en escena. «Tenemos a unos amigos, los principales youtubers de Europa -adelantó Antonio Castelo, en la piel del intérprete- Tienen cientos de millones de seguidores. Te los vamos a presentar». Respuesta de Bieber: «¿Cientos de millones? [gruñido, gruñido]». Lo siguiente que sucedió en el plató fue legendario: el artista se levantó, se dio media vuelta y se piró. «¡Por aquí, por aquí! ¡No te vayas!», le gritaron desde la mesa de No te pierdas nada. Pero fue en vano. Habían herido el ego del niño. No había nada más que hacer.

Su equipo, obligado a explicarse, argumentó que había demasiada gente en el estudio, que Bieber se agobió, que no se encontraba a gusto y que decidió abortar la entrevista. Se dirigió al desalojado baño, tal y como había anunciado, y se echó un pitillo en una sala, informa la Cadena Ser. Antes de abandonar el edificio, sin embargo, se topó con Xavi Martínez y Toni Aguilar en el pasillo y decidió concederles algunos minutos. Nada que ver, todo hay que decirlo, el tono de una entrevista y otra. El ambiente entre un estudio y el otro. 

Las disculpas por el plantón tardaron poco en llegar. Parece que los profesionales que le rodean están familiarizados con este tipo de situaciones. Tras el plantón, la cuenta de Twitter de Biber pedía perdón:

«Buenos momentos en España. Lo siento por encontrarme un poco enfermo. Las hormigas me hicieron sentir mejor :)». Se refería Bieber a su paso, a continuación, por el programa de Motos, Trancas y Barrancas. La de este miércoles fue la cuatra vez del joven en El Hormiguero. Su visita dejó un reguero de chillidos, magia y ciencia -algo habitual en este plató de Antena 3-, fans al borde del colapso y hasta música en directo (Justin Bieber interpretó el single de su nuevo disco). En ningún momento, Bieber se dignó a quitarse la capucha de sus sudadera y su gorra gris. Tampoco a cambiar su cara de hastío. 

¿Curiosidades? Justin Bieber confesó que  solo sabe decir «Te amo» y «Te quiero» en español, para tranquilidad de todas sus fans beliebers. 

El programa arrancó comentando varios dibujos de sus fans, para dar paso después a la promoción de su último disco, Purpose. «¿Tu entiendes a las chicas?» le preguntó Pablo Motos a Justin Bieber. «No», respondió él, aunque matizó que algo sí que entendía a su madre. Cada vez que sonaba el primer single de su nuevo trabajo What do you mean?, las fans del plató lo coreaban entre palmas. 

Así contestó Justin Bieber sobre si le era fácil conocer chicas siendo tan conocido. «Es la primera vez que después de esta pregunta y esta respuesta veo a las chicas levantar la mano», explicaba Pablo Motos. Mientras que una de las hormigas les preguntaba «¿Creeis que vais a ligar más por gritar»?. Y es que los gritos fueron la tónica dominante de todo el programa. Cuando el presentador y el invitado salieron a la calle para saludar a las miles de fans que, después de llenar Gran Vía durante horas, se trasladaron a los exteriores de Antena 3 para ver de cerca a Justin Bieber. 

Pero esa no fue la única de las perlas del chiquillo en el programa de Antena 3. También reveló que nunca había planchado una camisa y que tenía seis coches

Pablo Motos le entregó una tabla para volar sobre el agua, para que se llevase «un recuerdo de El Hormiguero». A continuación llegó la verdadera locura: Justin Bieber eligió a dos chicas de entre el público para bailar con él una coreografía y pudieron besar y abrazar a su ídolo. 

La entrada del Hombre de negro fue uno de los momentos que más pareció emocionar a Justin Bieber. Le tenía preparado una sorpresa: el castillo de arena más grande del mundo en un interior. Eso sí, enterradas en la arena, más de 50 cargas explosivas. La sorpresa fue que el canadiense pulsaría la techa que haría saltar por los aires la construcción que el programa tardó 10 días construír. 

Su apatía generalizada choca con el entusiasmo y la entrega de todas sus incondicionales. Aquí, un ejemplo del furor por Justin Bieber:

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