El desgarrador relato de Lena Dunham sobre su extirpación de útero

La actriz y creadora de la serie «Girls» se ha sometido a una histerectomía tras una década luchando contra la endometriosis, una enfermedad que afecta a una de cada diez mujeres


La Voz

«Siento que el útero que me dieron es defectuoso». Lena Dunham ha contado con sus propias palabras por qué ha decidido someterse a los 31 años a una histerectomía, una extirpación del útero. «He estado luchando contra la endometriosis durante una década y este será mi noveno procedimiento quirúrgico», confiesa la actriz y creadora de la serie Girls.  «En agosto, el dolor se volvió insoportable. El ultrasonido no mostraba quistes, ni líquido libre, y tampoco ningún bebé. Con un dolor como este, nunca podré ser la madre de nadie. Incluso si pudiera quedarme embarazada, no tendría nada que ofrecer», relata Dunham en la columna que ha publicado la edición norteamericana de la revista Vogue.

La actriz confiesa que lo intentó todo antes de someterse a la extirpación de útero. «Fui a terapia de piso pélvico, terapia de masaje, terapia de dolor, terapia de color, acupuntura, yoga y una breve pero horrible incursión en el masaje vaginal de un extraño», recuerda Dunham. Fue entonces cuando se plantó en un hospital y dijo que no se marcharía de allí hasta que le dejase de doler o le extirpasen el útero. Y tras un nuevo intento por calmarle el dolor y una semana de estancia en el hospital, finalmente Lena Dunham fue sometida a la intervención quirúrgica a finales del 2017. «Han pasado unos meses. A pesar de algunas pequeñas complicaciones, me estoy curando como una campeona. Cojeo, como resultado de un nervio pellizcado en la pelvis, pero me muevo como las nuevas botas de Balenciaga que me compré como regalo. Mi mente, mi espíritu, son otra historia», relata la actriz en la columna.

Lena Dunham explica en detalle las consecuencias de la endometriosis, una enfermedad que afecta a aproximadamente una de cada diez mujeres. Esta condición crónica está relacionada con el hecho de que el endometrio, el tejido que cubre el interior del útero, se desarrolla en otros órganos y puede causar lesiones, adherencias y quistes ováricos.  Tras la operación, ya no le es posible concebir un hijo, pero pronto se someterá a pruebas para detectar la posible presencia de ovocitos. Si los análisis fueran positivos, podría considerar una subrogación de vientre. Tampoco descarta la posibilidad de adoptar. A pesar de estas alternativas, Dunham lamenta no poder gestar un niño. «Quería tener ese vientre, quería ver cómo serían esos nueve meses de unión total. Estaba destinada para el trabajo, pero no pasé la entrevista».

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