Juego de Tronos 6x06: Todo lo que Bran nos dice en sus visiones
Tienes que verlo
El capítulo de esta semana inaugura la recta final de la temporada con un inesperado regreso y una reveladora secuencia de imágenes a través de los ojos del chico Stark. Ojo, este artículo contiene spoilers
31 May 2016. Actualizado a las 16:02 h.
Juego de Tronos empieza a desenredar la madeja. El capítulo seis inauguró la madrugada del domingo al lunes la recta final de una temporada dispuesta al fin a ofrecer respuestas. Atravesó su ecuador la semana pasada despidiendo a uno de sus personajes más entrañables, un desenlace inesperado que sin embargo nos dejó claro que la serie, a pesar de volar sola y concederse ciertas licencias con respecto a la historia original, no es amiga de la improvisación. Para contarnos todo lo que cinco temporadas se olvidaron de explicarnos, pero también los secretos que George R.R. Martin se ha visto obligado a soplarle a la HBO y que ni siquiera los que prefieren los libros saben, tenemos ahora a Bran. Sus visiones nos hacen comprender, su trama comienza a llenar los espacios en blanco.
A partir de aquí este artículo contiene spoilers y comentarios sobre el capítulo.
El sexto episodio de Juego de Tronos -Sangre de mi Sangre (Blood of my Blood)- es un capítulo de transición, una calma tensa y afilada antes de la tempestad que invita a una digestión reflexiva. Previo a la gran traca final -el ocho se llamará Nadie, el noveno La batalla de los bastardos y el décimo y último Vientos de invierno-, esconde bajo su superficie grandes dosis de información y recupera, para algarabía de los más incondicionales, a un personaje del que nos despedimos tan al principio que muchos, sobre todo los que hacen oídos sordos a las filtraciones, se habían olvidado ya de su existencia.
El tío Benjen
Juego de Tronos 6x06 arranca en el punto exacto en el que nos dejó el episodio cinco, con Bran y Meera escapando a la desesperada de una marea de Caminantes Blancos. Cuando todo parece perdido -el aliento de los espectros rozando la nuca de los fugitivos adolescentes-, aparece en escena la solución a todos sus males: un personaje, envuelto en una oscura capa negra que le cubre la cara, capaz de espantar a los incansables muertos.
Al emerger de su capucha descubrimos que se trata de Benjen Stark, de quien nos despedimos en la primera temporada a las puertas del Castillo Negro -dirección norte del norte, objetivo encontrar a los Otros- y a quien los más entendidos en el universo de R.R. Martin no dudaron en identificar al momento con Manosfrías. La de este personaje, que aparece por primera vez en la tercera novela de la saga fantástica pero de quien hasta ahora nada se sabía en su adaptación televisiva, es, junto a la del origen de Jon Snow, una de las teorías favoritas de los fans.
Atendiendo a los libros de Juego de Tronos, Manosfrías es un espectro, pero no un espectro al uso. Su voluntad no está quebrada por los Caminantes, es capaz de hablar y razona como un humano. Viste con ropas negras como las de la Guardia de la Noche, esconde su rostro tras un pañuelo y, tal y como indica su nombre, tiene las manos gélidas, como las de un cadáver. «Huele a carne muerta, sangre seca y a un leve soplo de podredumbre». Sobre el papel, salva a Sam, a Elí y a su hijo de ser atacados por los muertos y, en la quinta entrega, guía a Bran, Hodor, Meera y Jojen hasta el último verdevidente, el Cuervo de Tres Ojos. Todo encaja. No literalmente, pero se acerca. El tío Ben ha vuelto. Sangre de su sangre, tal y como predicaba el título del capítulo.
Las visiones
Antes del reencuentro familiar -y ya van dos en esta temporada de Juego de Tronos-, el chaval paralítico, ya sin su Hodor-muleta y arrastrado todavía en trance por una exhausta Meera, nos regala una nueva tanda de visiones. Esta vez a todo trapo. Nada de algún bucólico episodio como a los que nos acostumbró antes de aburrirse durante la siesta del Cuervo y liarla más que parda. En la secuencia de imágenes que se suceden a velocidad de vértigo en la cabeza del chico Stark asistimos al menos a cuatro muertes -es posible que incluso a una quinta, la de Lyanna-, tres que ya conocíamos (Ned, Catelyn y Robb) y una inédita, la del Rey Loco a manos de Jaime Lannister. Al fin conocemos Aerys II Targaryen, desquiciado -¿escuchará voces de Bran, tendrán algo que ver sus viajes astrales en su locura?-, fuera de sí, a grito pelado -«¡Quemadlos a todos!»-. Regresamos al nacimiento de los dragones de Daenerys y los vemos sobrevolando Desembarco del Rey, somos testigos de una enorme explosión de Fuego Valyrio -¿cuándo sucede eso?-, recordamos el nacimiento de los Caminantes Blancos y, tras contemplar de nuevo su desgraciada caída de la torre, confirmamos que Bran es el nuevo Cuervo de Tres Ojos.
Aquí, las imágenes a cámara lenta.
Sam vuelve a casa
De los Stark, Juego de Tronos 6x06 salta directamente a Sam, Elí y el pequeño Sam y su llegada a Colina Cuerno. Al agradable recibimiento por parte de su madre y su hermana le sucede una conflictiva reunión familiar alrededor de la mesa en la que el patriarca Randyll Tarly ningunea sin reparo alguno a su primogénito.
Le llama gordo, blando, incapaz. Tal es la humillación a la que su padre y su hermano pequeño someten a Sam que Elí se ve obligada a salir en su defensa. Así, el cabeza de familia descubre el salvaje linaje de la chica y, tras una despiadada tanda de insultos, acaba desterrando al aspirante a Gran Maestre. Antes de marcharse, a Sam se le enciende la bombilla y le birla a sus parientes Veneno de Corazon, la espada ancestral de acero valyrio de la Casa Tarly. Sabe bien cómo combatir al enemigo.
Margaery se libra del paseíllo de la vergueza
Mientras, Desembarco del Rey se prepara para el desfile de una desnuda, arrepentida y avergonzada Margaery. Aparecen entonces las tropas de su etirpe, guiadas por Jaime Lannister y la sabia Olenna Tyrell para evitar humillaciones y desarmar al Gorrión Supremo. Y sorpresa. El inocente Tommen anuncia, junto a su (¿convertida?) esposa, una inesperada «alianza entre la Corona y la Fe» que no es más que un puro y duro golpe de Estado.
El rey libra a su amada del paseíllo y se quita de en medio a su padre, que pone rumbo a Aguasdulces, donde previsiblemente se topará con Brienne, para tratar con el Pez Negro -tío de Catelyn Stark- y ayudar a Walder Frey, director de orquesta de la sanguinaria Boda Roja.
Arya vuelve a ser Arya
Prueba no superada. Arya defrauda en este Juego de Tronos 6x06 una vez más a Jaqen H'ghar, quien ya se lo esperaba, quien había pronosticado una nueva cara en la Casa de Blanco y Negro, el templo del Dios de Muchos Rostros de Braavos, y quien envía a la otra malencarada chica a darle muerte a la joven Stark. Su misión era sencilla, envenenar a la actriz que en el teatrillo callejero daba vida a Cersei. La primera sesión tragicómica fue complicada de digerir para Arya, en la piel de una ciudadana más, parte del público. En ella, la compañía de actores se mofaba de su historia familiar. Identificó la copa de ron donde debía vaciar el veneno, pero, a la hora de la verdad, evitó que Lady Crane, objetivo de la conspiración, ingiriese el contaminado líquido. Y le salvó la vida. ¿Qué es lo que lleva a Arya a truncar los planes de su instructor tras tanto tiempo entrenándose para ser nadie? Su naturaleza le impide ser injusta e inmoral. Es aquí donde emerge su apellido. Donde se ve que, por mucho que se empeñe, no es ni nunca será una asesina arbitraria. Imediatamente, corre a recuperar la espada que le regaló su hermano Jon, la pequeña y delgada Aguja escondida en las rocas.
Antes de cerrar el capítulo con una nueva y aburrida demostración de liderazgo por parte de Daenerys Targaryen, vuelve a escena Walder Frey, el hombre más odiado de Poniente. ¿Quién no recuerda a aquel señor con tantas hijas que organizó la gran masacre en la que murieron la madre de los Stark y el primogénito Robb, junto a su esposa y su futuro bebé? Este episodio de Juego de Tronos nos dice que intentará recuperar Aguasdulces de manos de los Tully. Se cocina una buena en el lugar.
El regreso de Drogon
Otro sermón más de la que no arde, la Khaleesi, la Daenerys de la Tormenta. Esta vez a los dothrakis. Así se cierra el sexto episodio, con una ostentación de poderío más -y ya van...- de la rubísima madre de los dragones, que recupera a Drogon y sobre él, insta a los guerreros nómadas a atravesar con ella el Mar Angosto. A ver si de una vez acaba tu eterno peregrinaje, chica.
Los muertos vienen...