El brutal acoso a Alicia en «Maestros de la costura»

El programa encara la recta final y ha estallado la guerra entre los concursantes


Redacción / La Voz

Los concursantes de Maestros de la costura han perdido la inocencia, si alguna vez realmente hicieron uso de ella en el programa. En la recta final del programa de talentos que busca al mejor modisto de España, se ha acabado la paz entre los concursantes. Una de las favoritas, Alicia, sufrió en el último programa la ira y el bullying del resto de sus compañeros, quedando claro que en este concurso ni hay amigos ni lealtades y que solo les importa el resultado de las pruebas. En el último Maestros de la costura la tensión saltó por los aires en la prueba inicial, que contó con la visita del diseñador gallego Jorge Vázquez, para que elaborasen un vestido con seda. 

Liderados por Eduardo, que fue expulsado y repescado hace poco, los concursantes demostraron que más que un concurso de alta costura, la academia de moda parecía un patio de colegio cualquiera donde se reproducía el peor de los bulliyngs. «No hay dos grupos, hay tres. Hay gente que somos más afines y luego hay otra persona que va más por solitario por el motivo que sea. Que es Alicia que va más a su bola», aseguraba Eduardo. El acoso al que sometieron algunos de sus compañeros a Alicia fue tal que no pasó desapercibido ante los espectadores, y algunos de ellos, indignados mostraron su rechazo a que una cadena pública como La 1 permitiese comentarios de ese calibre contra una compañera y los emitiese en prime-time. 

Eduardo ya es famoso por sus piques con Lorenzo Caprile, que en varias ocasiones ya le ha parado los pies y hasta la presentadora, una Raquel Sánchez Silva que como en todos sus programas es todo dulzura hacia los concursantes, le adviritió que su vuelta al programa había terminado por dividir un grupo que, a pesar de no ser completamente afín, aún conservaba el respeto mutuo.

La gallega Pa, madre de familia numerosa, describía a la perfección lo ocurrido durante la prueba de equipo entre Alicia y Anna, que terminó yéndose a su casa al final del programa. Anna le reprochaba a Alicia que le hablase «con superioridad». Pa explicaba «tuvieron su rifirrafe, lo he visto continuamente en mi casa con mis hijas, Anna es muy sentía y Alicia es más fría», explicaba. Alicia, muy ofendida, decía que se sentía ofendida por cómo se estaban haciendo y resumía que «está diciendo públicamente que ya no me ajunta», mientras de fondo Eduardo se reía de su expresión. Alicia se mostraba deshecha y entre lágrimas: «No puede ser que de repente me digan que voy a parte, y que me lo digan aquí delante, yo no he tenido esa sensación», decía sollozando. Y Alicia terminó por estallar. «Creo que por respeto a mí misma y por todo por lo que estoy luchando desde que tengo uso de razón, me parece que debo seguir aquí se me trate bien, se me trate mal, tenga amigos o no los tenga», confesaba entre lágrimas después de escuchar y ver la maldad del grupo liderado por Eduardo. La presentadora intentó aconsejarla, mientras el jurado veía la escena sin casi poder creersélo. «Apárcalo como puedas y pon toda tu energía en la prueba», le decía. Palomo les daba un consejo parecido, «en este momento del programa deberías hacer lo contrario, en lugar de perder el tiempo con esta charla y con esta disputa». Y Alicia se puso la coraza, y se centró únicamente en coser y diseñar, lo que la llevó a conseguir el alfiler de la inmunidad, mientras sus contrincantes tenían que digerir como podían su rabia. 

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