¿Ya ha llegado Nico a tu Whatsapp?
Un dibujo, elaborado en un colegio de Madrid, se ha propuesto dar la vuelta al mundo de teléfono en teléfono. ¿El objetivo? Demostrarle a los alumnos el poder de difusión de las fotos en las redes sociales y concienciarles de sus peligros
Si todavía no han recibido en su Whatsapp el dibujo de un monigote con visera, pajarita y un maletín en su mano izquierda, trazado con rotulador verde en una hoja cuadriculado, paciencia, pronto le llegará la imagen en alguna de sus conversaciones, individuales o colectivas, del servicio de mensajería instantánea. A Nico, que es así como se llama este simpático tipo que saluda desde el papel, le acompaña un mensaje: «Ayúdame a recorrer el mundo». Junto a la petición, una breve presentación -«soy Nico»-, seguida de un emoticono feliz y un texto que completa el misterio: «Una profe está haciendo un experimento con sus alumnos de 3º de ESO para que tomen conciencia de la rapidez con la que se difunden las imágenes sin poder controlarlas».
Hasta este miércoles, nadie sabía de dónde había salido Nico. Ni siquiera si era realmente un experimento educativo o una campaña publicitaria viral de alguna marca, por ejemplo, de la que figura en la cartera del monigote. Ganó la buena fe y el dibujo ya ha surcado redes sociales y chats, hasta acabar convertido en tema de conversación e incluso en titular. Detrás de él está la profesora Esmeralda Reviriego, docente del IES Las Veredillas, de Torrejón de Ardoz. El objetivo del experimento está más que cumplido: demostrar la repercusión de las redes sociales, hasta dónde puede llegar lo que publicamos, con qué velocidad es capaz de transmitirse la información (textual o gráfica) que subimos a la Red, qué puede suceder con las imágenes que colgamos alegremente en Internet.
Nico se creó el martes 28 de febrero. En menos de un día ya asomaba por grupos de Whatsapp de toda España y la Guardia Civil y la Policía lo compartían en sus respectivas cuentas oficiales de Twitter.
En cuanto la historia salió a la luz, los usuarios de la red social de los 140 caracteres hicieron suyo el monigote, ya con razón de ser, para reivindicar la responsabilidad y la cautela en las plataformas online.