Taylor Swift declara ante el juez haberse sentido «violada» por el presentador David Mueller

Ambos mantienen una contienda judicial después de que la cantante lo demandara por haberle «levantado la falda y pellizcarle el culo» sin su permiso tras un concierto en Colorado


El desencuentro entre la cantante Taylor Swift y el polémico locutor de radio David Mueller sigue dando de qué hablar. Después de que salieran a la luz algunos vídeos con más declaraciones de la cantante -publicados por US Magazine, el escándalo sigue creciendo. 

Ambos mantienen una sonada pugna en los tribunales estadounidenses a causa de un incidente que tuvo lugar hace ya un año tras un concierto de la popular cantante en Colorado. Y es que Swift acusó en su momento al presentador de haberle pellizcado el culo durante un encuentro con sus fans e intentar establecer más contacto físico del que ella estaba dispuesta. 

Mientras las imágenes del suceso -que habrían sido tomadas en un vídeo- siguen siendo todo un secreto por orden judicial, poco a poco vamos sabiendo más detalles de la pugna que ambos mantienen en los tribunales. En una grabación hecha pública estos días, Taylor Swift habla sin tapujos de lo que sucedió aquella noche y sobre cómo se sintió después de que el presentador se propasara, «invadiendo» su propia intimidad.

«Recuerdo sentirme completamente humillada, estaba muy nerviosa, alterada, y me sentía violada de una forma que jamás había experimentado antes. Se supone que un encuentro con fans debe ser una situación en la que das las gracias a la gente por su apoyo, en la que les das la bienvenida a tu casa, que en este caso es el escenario», comienza a relatar Taylor Swift en un testimonio que poco a poco se va volviendo más crítico: «Por eso me quedé completamente paralizada al comprobar que algunas personas solo quieren invadirte y aprovecharse de tu hospitalidad».

David Mueller sigue negando la mayor y a día de hoy mantiene su demanda judicial contra Taylor Swift, a la que acusa de haber sido culpable con sus «falsas acusaciones» de que sus jefes le despidieran de la emisora country en la que trabajaba. Las nuevas declaraciones de Swift caen como un jarro de agua fría para el presentador. En ellas, la cantante insiste en que sus inapropiados tocamientos fueron «claramente intencionados» y no hay ninguna posibilidad de que ella hubiera malinterpretado sus gestos.

«En el momento en que él me abrazó para sacarnos una foto, colocó su mano en mi trasero y acto seguido levantó la falda para agarrarme una de las nalgas con fuerza», explica Taylor Swift para después añadir: «Por mucho que tratara de escabullirme de él, no conseguí quitármelo de encima hasta el final. Lo que hizo fue claramente intencionado, es imposible que no se diera cuenta de lo que estaba haciendo. No he estado más segura de algo en mi vida». Además, en esta declaración, la cantante asegura haberse sentido «violada de una manera que nunca había experimentado antes».

Todo el escándalo saltó por los aires el pasado mes de julio, cuando Taylor Swift aseguró sentirse «sorprendida, ofendida, indignada y alarmada» tras un suceso que ella misma calificó de «muy grave» y que la llevó a emprender acciones legales contra David Mueller. Este no se quedó callado, porque en plena contienda acusó a los guardaespaldas de la intérprete de haber exhibido un nivel de agresividad «intolerable» cuando fue expulsado del recinto en el que todo había ocurrido.

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