Una concursante destapa los trapos sucios del programa de Sara Carbonero

A Quiero ser le crecen los enanos. Tras verse obligado a emigrar de Telecinco a Divinity a los dos días de su estreno -literalmente-, una de sus concursantes se ha puesto a hablar. Y lo que dice es de todo menos bonito. El regreso de Carbonero a la cadena estrella de Mediaset le salió rana a Vasile; quizá porque Sara -su principal reclamo- pinta poco y sale menos en el concurso de talentos de moda, quizá porque de moda el show anda escaso y sobrado de potencial trampolín a la fama, quizá porque la triada que acompaña a la que fue reportera deportiva en tiempos de Mundiales y Eurocopas -el diseñador Cristo Báñez y las influencer Dulceida y Madame de Rosa- no acaba de cuajar. O quizá porque la naturalidad brilla por su ausencia. Se queja de ello Celia Fuentes, el ingrediente polémico de la primera -y posiblemente única- temporada de este proyecto televisivo, exponiendo en sus redes sociales todo tipo de lindeces sobre el formato y sus coaches.

La ibicenca, incorporada al elenco de participantes de Quiero ser tras la mudanza a la segunda división de Mediaset, acusa ahora al programa de manipulación. Asegura que, entre otras cosas, Dulceida -una de las blogueras más reputadas y reclamadas del panorama nacional, con más de un millón de seguidores en Instagram pendientes de cada uno de sus movimientos- prometió ante las cámaras publicar una foto con la ganadora de la prueba -ella- en sus perfiles sociales. Pero el momento fue finalmente suprimido en el montaje final.

«La prueba está íntegra colgada en MiTele. ¿Miento yo o quién miente? No os interesaba que ganara yo y habéis omitido esa parte. Admiro a Dulceida, pero así no se hacen las cosas y mucho menos cuando está grabado y tengo pruebas de ello. 'Bienvenidos a Quiero ser'», se desahogó Celia en una primera publicación que posteriormente editó para suavizarla: «Alguien ha visto hoy la prueba? En la que se decía que la ganadora y @dulceida serían una foto que pondrían en Instagram? Espero que se vea mañana...». 

Los dardos no se quedaron ahí. Un día más tarde volvió a dar noticias por la misma vía. Mismo tono: queja por detalles sobre su persona omitidos deliberadamente por el programa y un aviso. «Pronto sabréis la verdad de todo».

¿Qué verdad? Que le pintaron un escenario totalmente distinto al real, relata a Vanitatis la concursante. Que todo está guionizado, que Quiero ser peca de falta de naturalidad, que lo que sucede está dirigido por la organización. «Teníamos una persona específica que malmetía entre nosotros para que discutiéramos», confiesa al citado medio, donde explica que la decisión de salir del concurso fue suya, no de la productora. El tema ya está en manos de sus respectivos abogados.

Mientras, Celia sigue informando de su particular cruzada a través de Instagram. Este miércoles, publicó un vídeo prometiendo explicaciones en un canal de Youtube de nueva creación -todavía vacío- y un comunicado de su abogado en el que confirma que la de Ibiza entiende que el show de Quiero ser está «orquestado» para «ganar audiencia» en «detrimento de la total libertad de opinión y actuación como influencer de moda» y donde explica que la concursante no quiso prolongar su participación en el programa y que, por esta razón, tomó la «unilateral decisión» de abandonarlo.