¿Una Hermione Granger negra en «Harry Potter y el niño maldito»?

Que la mejor amiga de Harry Potter no sea trigueña y pálida en su versión adulta y teatral ha desconcertado a los seguidores de la saga. El tema ya se convirtió en objeto de discusión el pasado diciembre, cuando compartió sitio en la lista de Trendings con las elecciones. Una nueva imagen promocional de la obra reabre el debate


El pasado 22 de diciembre, dos temas capitales acaparaban el debate en las redes: quién iba a gobernar y la raza de Hermione Granger. Si el nombre no les suena lo más mínimo, es el momento de dejar de leer y retomar los posibles pactos de gobierno que, lamentablemente, todavía no han perdido actualidad. Si, en cambio, entran dentro del club de lectores familiarizados con las aventuras del joven aprendiz de magia y hechicería Harry Potter, repartidas en siete libros sin desperdicio, sabrán de lo que les hablamos. Hermione es la inseparable, inteligentísima e ingeniosa mejor amiga de Harry Potter. Junto a Ron, tercero en concordia, integran el trío protagonista de la popular saga fantástica ideada por J.K. Rowling, un negocio que se completa con ocho películas -una por libro y el último, dividido en dos largometrajes-, videojuegos varios e incluso dos parques de atracciones. Y ahora, también, una obra de teatro.

La octava historia de Harry Potter, Harry Potter and the Cursed Child (Harry Potter y el niño maldito), se desarrolla 19 años después del final de la saga y relata las aventuras de Albus Severus Potter, hijo pequeño de Harry. El mago protagonista de las siete primeras entregas es ahora un adulto, padre de familia, funcionario sobreexplotado del ministerio de la Magia. También sus dos colegas se han hecho mayores. Y, para disgusto de sus fans, su aspecto cambia significativamente con respecto al de las películas. Ron no es pelirrojo, sino rubio. Y Hermione es negra. Seis meses después, una nueva imagen promocional de la adaptación teatral ha reabierto el debate. 

La joven maga aparece por primera vez en la historia en el Expreso de Hogwarts, el tren en el que Harry y Ron se dirigen a la escuela de hechicería donde se formarán durante seis cursos como magos. Es el comienzo de una bonita amistad. Rowling la describe como una niña con el pelo castaño claro, largo y enmarañado, un poco ondulado, de ojos marrones, incisivos y bastante grandes, una de las estudiantes más aplicadas del colegio, valiente y leal, trabajadora y con una conciencia política brava. Pero nunca habla de su raza. Sin embargo, los nuevos detractores de la Hermione negra aseguran empecinadamente que en el papel se habla de «tez pálida».

En las películas, la actriz inglesa Emma Watson, de raza blanca, encarna a Granger. Pero en la nueva versión, la de la vida adulta de los magos, es una actriz negra la que se pone en el papel de mejor amiga de Harry. Noma Dumezweni está acompañada en el reparto de Jamie Parker, en la piel de Potter, y Paul Thornley, en la de Ron Weasley.

La decisión de escoger a una mujer africana para interpretar a Hermione ha descolocado por completo a los seguidores más incondicionales del universo fantástico, que han volcado en las redes sociales su sorpresa, desconcierto e incluso indignación ante tal decisión. La mayoría coinciden en que su cabreo no responde a prejuicios racistas, sino a la desvirtualización del personaje.

Tal ha sido el revuelo generado que J.K.Rowling se vio obligado a posicionarse al respecto. Esto es lo que escribió en su Twitter cuando saltó la polémica:

«El canon de Harry Potter establece que Hermione tiene ojos marrones, pelo encrespado y es muy inteligente. Nunca se menciona piel blanca. A Rowling le encanta Hermione negra».

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