«Buscar al panda», el entretenimiento estrella del invierno

El artista húngaro Gergely Dudás (conocido como Dudolf) abrió la veda de encontrar al entrañable mamífero con una ilustración publicada en su Facebook en la que un despistado panda compartía imagen con muñecos de nieve. Nivel: Alto. Fue el primero y sigue siendo de los más complejos.

Los fans de la saga de La Guerra de las Galaxias también tienen su ración de buscar al panda. Precisamente ahora que la serie de películas iniciadas por George Lucas están tan a la última, a cualquiera le pone feliz buscar al mamífero entre las temibles tropas imperiales. Nivel: Fácil.

Cuando surgió todo esto del panda, la estadounidense Tracy Lynn Heightcrew vio este fenómeno viral como algo familiar. Ella misma tenía una fotografía de 1978 en la que, entre mucha gente posando con gafas de coña o ropa original, había también un panda. El juego, llevado a la vida real. Nivel: Muy difícil.

Qué mejor lugar para esconder sus colores que entre una buena camada de dálmatas. Eso sí, debería tener cuidado con Cruella de Vil. Puede que tampoco ella sea capaz de distinguirlo. Nivel: Alto.

Quizás el panda no está entre estos fans de black metal porque se haya despistado. Igual se siente más identificado con esa gente que se pinta en la cara esas ojeras negras que él tanto odia en sí mismo. O quizás haya decidido presentar una demanda a los fans del heavy metal extremo y también a Kiss, Alice Cooper o a todo el que se precie. Nivel: Fácil.

El panda ha encontrado el mejor lugar para esconderse: el paisaje nevado donde trabajan Santa Claus y viven las principales criaturas de ensueño, como daagones, unicornios e incluso Shrek. En la tradición de buscar a Wally, esta imagen muestra todo tipo de detalles, personajes y situaciones. Y, entre ellos, un panda. Nivel: Medio.

Pues ahí están Merkel, Hollande, Sarkozy, Zapatero,... Y también un panda, que se ha colado entre los principales líderes mundiales. Por eso de codearse con los poderosos. Nivel: Medio-alto.

Un panda se ha colado en una reunión de los grandes de la Iglesia. Si lo que buscas son sus cálidos ojitos mirándote, ten en cuenta de que, en la imagen, todo el mundo está dándonos la espalda. Nivel: Medio.

Sí, esos cientos de personas están recibiendo masajes faciales, con otros cientos que se los aplican. Entre toda esa gente, hay un panda. Con esas ojeras, él lo necesita más que nadie. Nivel: Solo para gente con ojo de lince.

Aunque el panda y los perros no se parecen en nada, el oso también es capaz de pasar desapercibido entre los canes. A diferencia de muchos de los sabuesos y de otras imágenes, aquí el panda está visiblemente feliz. Nivel: Bastante fácil.

El blanco y negro del panda se presta para que imágenes tan sencillas aparentemente como esta presenten todo un reto para nuestra capacidad visual. Entre toda esa botica hay un panda. Nivel: Bastante fácil.

Hay uno escondido entre todos estos coches. Hay que advertir que este reto tiene truco. Para encontrarlo tienes que preguntarte primero si sabes perfectamente cómo es un Panda. Nivel: experto del motor.

Por si eres de los negados para este tipo de juegos, te proponemos el reto de consolación. No cabe ninguna duda de que serás capaz de ver un panda en este cuadro vacío. Nivel: Preescolar.